Se cumplieron ayer tres meses del asesinato de Fernando Báez Sosa. La investigación sigue su curso con la prisión preventiva de 8 imputados. Por otro lado vecinos de Villa Gesell han remarcado con malestar que en las últimas horas se conoció que el santuario que se había armado frente a Le Brique, apareció limpio.
Un sábado como el de ayer, pero hace tres meses, Villa Gesell amanecía triste por la noticia de lo que había ocurrido en la madrugada en las cercanías al boliche bailable Le Brique. Un grupo de jóvenes asesinaba a golpes a otro, en un acto “cobarde” que no quedó impune. Diez muchachos que no supieron poner punto final a una discusión de las que ocurren habitualmente en el interior de un boliche, se convirtieron hoy en diez asesinos, dos que gozan con el privilegio de estar cumpliendo condena en su casa y ocho que continúan detenidos en el penitenciario de Melchor Romero.
A tres meses del asesinato de Fernando Báez Sosa, un joven de 18 años que vino a Villa Gesell a disfrutar de un fin de semana con amigos y su novia, los vecinos de la ciudad se mostraron conmovidos por haberse encontrado, de un día para el otro, con el árbol que se había convertido en santuario, limpio. Sin cartas, sin velas, sin los mensajes que tanto, turistas como residentes, dejaban a la familia en apoyo a seguir con la causa para que este asesinato no quede impune y que los actores de tan aberrante hecho, paguen.
En redes sociales los vecinos se preguntaron ¿Qué pasó con el santuario?. La respuesta la dieron comerciantes de la zona, quienes han explicado que debieron sacar lo que se encontraba allí, ya que con la presencia del aislamiento obligatorio, no se estaba pudiendo mantener el lugar y las últimas tormentas con vientos hicieron que se volaran los objetos depositados allí y que por tanto lo han guardado en cajas para hacérselo llegar a la familia. Lo cierto es que ya no están más las fotos y esos mensajes que acompañaban a la familia. A pesar de no estar más estos gestos de los vecinos, el lugar, seguirá siendo emblemático ya que fue un cantero que marcó un antes y un después en la nocturnidad geselina y en el actuar de la sociedad que se unió en el pedido de justicia por el “cobarde” asesinato de Fernando.
Todo sigue igual. Los pedidos de la defensa de los hoy 8 detenidos no fueron acompañados. Durante estos tres meses las jugadas del abogado defensor fueron las de intentar remover de la causa a la Dra. Verónica Zamboni, quien viene llevando adelante la investigación. Pedido que no fue acompañado en dos ocasiones y la propia justicia Dolorense ratificó el trabajo que viene llevando adelante como así también lo hizo el Juez de Garantías de Villa Gesell el Dr. David Mancinelli que dejó efectiva las prisiones preventivas para los 8 de los 10 imputados que posee la causa.
Máximo Thomsen; Luciano, Ciro y Lucas Pertossi, Tomás Enzo Comelli, Ayrton Michael Viollaz, Blas Cinalli y Matías Benicelli seguirán presos hasta el juicio oral, el cual se estima que podría ser a fines de este año o en el año venidero, complicándose la situación de Blas Cinalli ya que se encontró material genético en las uñas de Fernando.
Thomsen y Ciro Pertossi están acusados de ser coautores del delito de “homicidio agravado por alevosía y por concurso premeditado de dos o más personas”, mientras que los otros seis fueron sindicados como “partícipes necesarios”.