A golpes de puño y bastonazos, un hombre de 62 años asesinó a su suegra, de 104, en Tucumán.
Todo sucedió cuando Rosa Andrada intentó defender a su hija, también de 62 y esposa del agresor, durante una discusión. La primera de las víctimas logró alejarse dentro de la casa, donde todos vivían, gracias a su progenitora. Pero él, fuera de sí, sometió a una paliza a su suegra. Esta cayó al suelo y falleció. Su hija, en tanto, logró huir del domicilio mientras un vecino dio aviso a la Policía.
Agentes de la fuerza detuvieron en el mismo lugar al implicado y los peritos de la Científica incautaron el bastón empleado, que pertenece al propio homicida.
Este afronta cargos por “homicidio agravado” y “homicidio en grado de tentativa”.
