El súbito incremento del 7% que vienen registrando los precios implícitos del dólar que surgen de operaciones bursátiles destinadas a permitir el traspaso de moneda en lo que va del año, sumado al que definió el recargo impositivo “solidario” que encareció más al dólar oficial, volvió a provocar que la forma más barata de acceder al billete en la plaza local sea comprándolo “en negro”.
Esta distorsión no es la primera vez que se produce pero, no por eso, deja de llamar la atención.
Concretamente, el dólar oficial después de la puesta en vigencia del impuesto sólo quedó disponible (y en cuentagotas) para no alcanzados por las excepciones fijadas por la ley 27.541 a un valor promedio de $81,85, considerando el recargo del 30% sobre el precio de venta de $62,96 promedio que relevó hoy el Banco Central (BCRA).
Desde ese día (23/12) quedó entronizado como el dólar más caro del mercado, título que no resignó hasta hoy pese a algunos pronósticos al respecto que reseñaban que el resto de los valores de la divisa lo alcanzarían, aunque comienza a estar amenazado ahora por la escalada que vienen ensayando ahora el Contado con Liquidación (CCL), que quedó apenas 2,75% abajo, y el MEP o Bolsa, que quedó 5,15% atrás.
El dólar (CCL) es aquel que sirve para ingresar o sacar divisas del país comprando y vendiendo bonos o acciones que operen simultáneamente en la Bolsa de Buenos Aires y la de Nueva York. Su precio, que había terminado el 2019 en promedio a $74,65, quedó hoy a $79,61, tras un rally sostendido en el comienzo de año cerró (operó en alza todos los días), lo que lo dejó al acecho del oficial.
Tercero en ese ranking pasó a ubicarse el dólar Bolsa o MEP, tipo de cambio que surge de la compra con pesos un bono nominado en dólares (por caso el Bonar24 o AY24 según su identificación de mercado) y su venta luego en dólares (AY24D). De la operación, que posibilita que entre privados locales puedan transferirse pesos y dólares con beneficios mutuos (el que busca pesos logra hacer rendir sus dólares casi 30% que si los vendiera por el mercado oficial donde se los pagan a $59,82 y el que busca dólares los compra algo más barato aún que si fuera por la plaza oficial), surgía un precio del dólar de $72,43 a fin de año.
Pero de las operaciones concretadas en la jornada de hoy surgió un valor $77,65, es decir, apenas $ 4,20 más barato, cuando la distancia era de $9,47 el último día del año anterior.
El avance del 7% promedio que se anotaron estos valores libres del dólar en las últimas 7 ruedas (se trata de operaciones legales realizadas con dinero declarado) y la baja que en el mismo lapso se anotó el valor del dólar paralelo (eufemísticamente denominado blue) en el mercado negro al caer de $77,25 a $75,25 en lo que va del 2020 hicieron que precisamente el dólar ilegal pase a ser el más barato, cuando había terminado 2019 siendo el más caro de los los libres.
Para los analistas, la estabilización del dólar paralelo es consecuencia de la amplitud que tuvo la dolarización en la última parte de 2019, cuando entre 1,5 y casi 1,8 millones de argentinos corrían a demandarlo. Eso derivó recursos “extras” al mercado de cambios ilegal, habitualmente bien abastecido por una economía que mantiene un alto porcentaje de operaciones en negro.
En paralelo, el encarecimiento que registraron los precios del dólar que surgen de las operaciones con activos habría derivado de la “toma de ganancias” que hicieron inversores y fondos del exterior al comenzar a desprenderse de bonos en pesos que, a la recuperación que ya había mostrado a fin de año -cuando el Gobierno los rescató del reperfilamiento y eligió refinanciarlos con operaciones de mercado- agregaron ganancias que van del 20 al 35% en el inicio de 2020.
“Digamos que el margen de ganancias que tuvieron amerita a que muchos se hayan tentado a realizarlas y, una vez con los pesos en manos, buscaron la forma de dolarizarse o enviar esa ganancia al exterior. No me sorprendería que un fondo grande lo haya decidido, dada la firmeza que mostraron en los últimos días el MEP y el CCL”, apuntó el analista Santiago López Alfaro, de Delphos Investmet.
Para Adrián Yarde Buller, del Grupo SBS, el encarecimiento de los precios libres legales del dólar deriva básicamente de “los últimos pasos de la política monetaria” por lo que, tarde o temprano, terminará impactando también en el blue.
“Luego de la fuerte expansión monetaria de las últimas semanas y de la señal que mandó ayer el BCRA volviendo a bajar el piso de la tasa de referencia es lógico que estos diferenciales se muevan al alza”, dice. Pero a la vez aclara que lo que más empujó al CCL y al MEP en estos últimos días “fue el cierre de posiciones con bonos en pesos tras un par de semanas de subas muy fuertes” coincidiendo con su colega.